La Nueva | 14/04/2024
Por Pablo Álvarez
Según datos oficiales, hay 21 mil alumnos que acuden a las 80 instituciones privadas oficiales que funcionan en nuestra ciudad, la gran mayoría en condiciones de ingresar en este plan de ayuda.
Con muchas familias interesadas, el programa de asistencia “Vouchers Educativos” ya comenzó a dar sus primeros pasos en Bahía Blanca.
El plan, lanzado por el Ministerio de Capital Humano de Nación y que se encuentra disponible hasta el miércoles 30 de este mes, está destinado a ayudar a familias de clase media a pagar las cuotas de los colegios privados.
Según datos oficiales, en establecimientos públicos y privados la matrícula en nuestra ciudad comprende casi 13 mil alumnos de Jardín de Infantes; cerca de 29.000 de nivel primario y poco más de 22 mil de secundario.
De ellos, en los tres niveles, se estima que hay 21 mil alumnos que acuden a las 80 instituciones privadas oficiales que funcionan en nuestra ciudad, la gran mayoría en condiciones de ingresar en este programa al contar con al menos 75% de aporte estatal.
“Estamos de acuerdo con todo lo que sea una ayuda para las familias, pero está claro que, pese a ser una iniciativa muy importante, es sólo un paliativo para la gravísima situación que vive la mayoría de los establecimientos educativos privados”, reconoció Martín Zurita, secretario Ejecutivo de la Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de la provincia de Buenos Aires.
Zurita manifestó que, a nivel provincial, de los 6.300 colegios privados, 2.900 están subvencionados (o con el 100 o con el 80%). En total, a esas escuelas asisten unos 800 mil estudiantes.
“Al menos la mitad de esos alumnos podría recibir la ayuda de este plan. En la seccional de Bahía Blanca hay 110 servicios educativos en condiciones de ingresar a este programa, que es la gran mayoría”, amplió y aclaró que en principio es sólo por tres meses: mayo, junio y julio.
“Nosotros ya hicimos el pedido de que el programa se extienda a todo el ciclo lectivo. Creemos que así será”, dijo Zurita.
Hay varios argumentos por los cuales las familias eligen las escuelas privadas.
“Muchos dicen que es por la cantidad de paros que sufren las públicas, pero creo que va mucho más allá. La escuela privada representa una superación en la búsqueda de proyectos educativos y de innovar permanentemente, tanto en sistemas como en equipamiento y en infraestructura”.
Zurita confirmó que el próximo jueves estará en Bahía Blanca para desarrollar una reunión muy importante con representantes de los establecimientos educativos privados locales y probablemente con presencia de funcionarios provinciales para analizar puntualmente el tema en la ciudad y en la zona de influencia.
La tormenta perfecta
En el marco de un proceso inflacionario que parece no tener fin, los colegios privados, tanto los que cuentan con aportes estatales como los que no, se encuentran en una situación crítica de desfinanciamiento por el constante aumento de costos.
Paralelamente, muchas familias no pueden afrontar el incremento de la educación de sus hijos e ingresan en morosidad.
“Esta crisis del sector no es nueva. Ya viene de arrastre de muchos años, se profundizó en pandemia y se intensificó en el último cuatrimestre del año pasado”.
Pese a esta situación, Zurita manifestó que en este ciclo lectivo que recién comienza no se ha percibido un éxodo significativo hacia la educación pública, excepto en el nivel inicial, donde sí se notó una baja por tercer año consecutivo en la matrícula para salas maternales o jardines de infantes.
“En el nivel primario prácticamente no hubo movimiento y hubo una merma pequeña en las inscripciones para el secundario. De todos modos, en Bahía Blanca los números se mantienen bastante estables. Las estadísticas marcan mas movimiento a la baja en el conurbano bonaerense”.
El secretario Ejecutivo de la Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de la provincia de Buenos Aires reconoció que, en contrapartida, sí se ha notado un movimiento de alumnos desde escuelas de mayor cuota a escuelas de cuota media; y desde escuelas de cuota media a escuelas de cuota más económica.
“Pero hay un sector de la población que manda a sus hijos a las escuelas más económicas, que ya no las pueden sostener y que, por ende, tienen que salir del privado”.
Para este último sector, el que corre riesgo de “caerse” de la escuela privada, fue pensada por el Gobierno la medida anunciada la semana pasada: un subsidio estatal (vía Anses) de la mitad de la cuota de cada alumno, siempre que no supere los $54.396, el colegio privado tenga 75% de aporte oficial y los ingresos del grupo familiar no superen $1.419.600.
Zurita aclaró que el dinero no va directamente a las arcas de las instituciones privadas, sino a las propias familias que se anotan y son aprobadas.
“Por lo pronto tenemos el interrogante de si realmente ese dinero va a ir destinado al pago de la cuota. Queremos pensar que sí, porque la gente que envía a sus hijos a un establecimiento privado lo ve como una inversión y no como un gasto. Pero también es real que, cuando la situación apremia, muchas veces los fondos pueden ser destinados a otra cosa”.
Y añadió: “Nosotros vemos mucho esfuerzo de las familias para pagar las cuotas. Y lo acompañamos. De hecho, está comprobado que las cuotas aumentaron por debajo del índice de inflación, lo que quiere decir que los colegios privados hicieron también un esfuerzo grande para mantener la matrícula”.
Otra aclaración que realizó Zurita es que el beneficio implica una retribución por hijo del 50% del arancel básico curricular, sin contemplar materias extraprogramática ni extracurriculares.
“Los vouchers equivalen al 50% de la cuota base. Y aquí hay que detenerse en un dato: son muy pocas las escuelas que con la cuota base cubren todos sus servicios”.
La mayoría de las escuelas ofrecen servicios, como pueden ser deportes, idiomas, manualidades y jornada extendida, entre otras, por sobre esa cuota base.
“El voucher va a ser el 50% sobre lo que figure como cuota base. En promedio, la cuota base parte de los 20 mil pesos en los colegios que tienen 100% de subvención. En las de 80% asciende a alrededor de 25-30 mil. Obviamente que antes que nada, es bueno”.
Desfinanciamiento y morosidad
Martín Zurita estimó que una de cada cuatro familias está en mora con el pago de las cuotas en los colegios privados bahienses, que va en línea con lo que sucede en el resto del territorio bonaerense.
“Cerramos el año 2023 con un 20% de morosidad, pero suele pasar que en marzo la gente se pone al día o formaliza un plan de pago para arrancar el año sin contratiempos. Esos datos los vamos a tener procesados para fines de abril. Pero sospechamos que ese índice se va a mantener en esos guarismos”.
Para este año, entre Capital y Provincia, cerraron 80 escuelas privadas. Algunas de muchísima trayectoria, algunas de 80 años, lo cual es una preocupación y marca la crisis del sector.
“Antes cerraban las que no tenían “espalda”, por decirlo de cierta manera, pero ahora se está viendo otra faceta de la problemática, que es la falta de rentabilidad y sostenibilidad. Una escuela privada, en definitiva, es una pyme”.
“En Bahía no tomamos conocimiento de cierres de establecimientos privados”, añadió.
Según Zurita, entre el 80 y el 90% de lo que se recauda por el pago de las cuotas va destinado a los salarios docentes.
“Y ahora se debe sumar el importante incremento de los servicios básicos, como el agua, la luz y el gas. Por eso, los establecimientos privados hacen malabares para subsistir”.
Un aspecto positivo de la implementación del “voucher educativo” es que puede convertirse en una herramienta para combatir la competencia desleal que se produce en este sector, principalmente en los niveles iniciales.
“Hay muchos establecimientos que funcionan en la clandestinidad, en lugares no habilitados como corresponde y sin el personal capacitado, por lo cual los padres pagan una cuota mucho menor. Este voucher puede incidir en que la gente no recurra a estos lugares, porque en esos no va a recibir ningún tipo de ayuda”.
En ese tren, Zurita volvió a exponer con preocupación la situación de los jardines maternales.
“No reciben subvención ni ayuda estatal de ningún tipo, son fundamentales para la clase trabajadora y cada vez tienen menos matrícula. Es fundamental asistir a ese sector, porque tampoco el Estado ofrece ese servicio, que es muy utilizado por padres que necesitan dejar a sus hijos allí para poder trabajar”, consideró el referente de los colegios privados de la Provincia.
Y amplió: “Ese sector puntual atraviesa un momento límite. De hecho, la mayoría de los cierres provienen de allí”.
Sigue la inscripción
El programa de Vouchers Educativos 2024, lanzado por el Ministerio de Capital Humano para ayudar a familias de clase media a pagar las cuotas de los colegios privados, se encuentra disponible para su inscripción hasta el miércoles 30.
Cabe recordar que la inscripción deberá ser realizada por uno de los padres o tutores de estudiantes menores de 18 años, indicando en el formulario el CBU donde se acreditará el subsidio y el establecimiento educativo que recibirá el mismo.
Según lo anunciado por la Secretaría de Educación, encargada de la implementación del programa, se estima que casi 2 millones de estudiantes que asisten a más de 6 mil escuelas en todo el país podrían beneficiarse; siempre y cuando sus padres tengan un ingreso familiar que no supere 7 veces el Salario Mínimo Vital y Móvil, lo cual equivale a $1.419.600 mensuales.
El subsidio lo cobrarán aquellos que envíen a sus hijos a instituciones educativas de los niveles inicial, primario y secundario, con un subsidio estatal del 75% o más, durante tres meses.
El voucher tendrá un tope de $27.198 por hijo y aplica a las instituciones cuya cuota mensual no supere los $54.396. Los beneficiarios recibirán una suma de asistencia económica equivalente al 50% del valor del arancel de jornada simple, sin incluir actividades extraprogramáticas, en función de la cuota base (marzo 2024) para mayo, junio y julio. El trámite no deberá renovarse mes a mes.
Para que se concrete el pago, las instituciones que se encuentren dentro del programa deberán certificar la condición de regularidad de los estudiantes aspirantes.
Los beneficiarios que se inscriban y sean validados por las instituciones educativas entre el 3 y el 18 de abril recibirán el primer pago a comienzos de mayo y los siguientes en junio y julio.
Quienes se inscriban del 19 al 30 de abril y sean validados por las instituciones educativas entre el 19 de abril y el 10 mayo recibirán el primer y el segundo pago en junio y el tercero en julio.
Por el gran caudal de consultas, la página web para solicitar el beneficio funciona con intermitencias. Esto generó quejas de usuarios en las redes sociales que se veían impedidos para realizar el trámite virtual en https://voucherseducativos.educacion.gob.ar/
¿Se puede perder el beneficio?
Hay ciertos motivos por los cuales se procede a la suspensión de los vouchers. Según informó el gobierno, ya no podrán acceder a la ayuda económica los alumnos que estén bajo alguna de las siguientes condiciones:
--Pérdida de la condición de alumno regular o fallecimiento
--Renuncia del responsable parental (el programa contempla como grupo familiar al padre, madre o tutor).
--La falsedad u omisión de información en el proceso de inscripción.
--Modificación de alguna de las causas que justificaron su otorgamiento: los beneficiarios deberán informar cambios de domicilio, pases de escuela, o cualquier otra variación relativa a su situación personal, familiar, patrimonial, laboral, económica y académica. De lo contrario, el beneficio quedará sin efecto.
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